El Consejo de Ministros dio luz verde al Proyecto de Ley de fomento del ecosistema de las empresas emergentes, más conocida como Ley de Startups, con la que, según afirmó Moncloa, “España se posiciona a la vanguardia de Europa en apoyo al ecosistema de empresas innovadoras de base tecnológica, atracción de inversión y talento”.
El proyecto de ley cataloga como startups a “aquellas empresas que sean innovadoras, de nueva creación o con una antigüedad de hasta cinco años en general, o de siete años en el caso de empresas de biotecnología, energía e industriales; que tengan su sede social, establecimiento permanente y la mayoría del empleo en España; que no hayan distribuido dividendos y no sean cotizadas, y que tengan ingresos de hasta 5 millones de euros”.
Entre otros asuntos destacados, la futura norma contempla, en materia fiscal, medidas para las futuras empresas y los trabajadores:
Así, los primeros 100.000 euros de inversión estarán libres de impuestos y el tipo de deducción por inversión se ha incrementado, siendo del 50% durante el periodo de reciente creación de la empresa emergente, que será de cinco años y siete en el caso de las biotecnológicas, tal y como recoge la definición de startup de la ley.
Además, se reduce en diez puntos el tipo impositivo en el Impuesto de Sociedades y en el Impuesto sobre la Renta de No Residentes, pasando del 25% al 15% durante los primeros cuatro años desde que la base imponible de dicho tributo sea positiva, y se podrá aplazar la deuda tributaria de ambos impuestos en los dos primeros ejercicios desde que la base imponible sea positiva, sin garantías ni intereses de demora.
Asimismo, se ha revisado la base máxima de la deducción por inversión en empresas de nueva o reciente creación, que sube de 60.000 a 100.000 euros, con un tipo que se incrementa del 30% al 50%.
También habrá una exención fiscal para aquellos que prefieran la retribución vía stock options (opciones de compra de acciones), de hasta 50.000 euros anuales.
Con el fin de incentivar la instalación de los conocidos como “nómadas digitales”, esto es, emprendedores y trabajadores que se desplacen a territorio español, la normativa les ofrece la posibilidad de que residan y trabajen en España durante cinco años y puedan tributar por el Impuesto sobre la Renta de No Residentes. Los españoles que hayan sido no residentes en España durante al menos cinco años también podrán acogerse a este “visado especial”. Al respecto, la vicepresidenta segunda y ministra de Economía, Nadia Calviño, afirmó: “Esta ley surge en un momento en que cada vez hay más nómadas digitales y está pensada muy especialmente en la generación de oportunidades para los jóvenes. Pondrá a España a la vanguardia en la creación de empresas”.
La futura Ley de Startups forma parte del paquete de medidas que España se comprometió a aprobar ante la Unión Europea, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Ahora tendrá que ser tramitada en el Congreso, cuyo plazo límite para su aprobación es el último trimestre de 2022.
